Córdoba.

En Valdepeñas, tuve un experiencia fascinante, de entre toda la maravillosa gente que vino a escuchar nuestro concierto, Juan Antonio y Paqui (una pareja con acento andaluz), se acercaron a pedirme un disco para sus hijas. Resultaron ser cordobeses, y que a la semana siguiente actuaría por allí, así que el destino volvió a unirnos en su tierra.

El viernes 6 de mayo canté en La Casa Azul de Córdoba, un espacio socio-cultural y agroecológico en donde se dan cita el arte, la construcción, las relaciones y el debate, mezclados con talleres, exposiciones, una biblioteca, una cantina... Situada en pleno centro de Córdoba, con un precioso patio de táselas de colores, columnas, plantas y flores. Llovió toda la tarde, pero al final el cielo nos dio una pequeña tregua para poder salir a ver las flores que decoraban los patios.

La actuación con Curro Rumbao fue genial. Él es un musicazo en toda regla, hablamos de canciones, y de afinaciones; del amor verdadero... Es un placer encontrarte en el camino con gente parecida a ti, a la que le suceden cosas parecidas, y cómo reaccionamos de distintas maneras para terminar cantando juntos en un mismo escenario.

Dormir escuchando cómo cae la lluvia es precioso...

Cuando amaneció vimos los tejados y San Agustín, y nos marchamos pensando en volver.